AUTORA: Ana María López Expósito Tu voz soñó la duna de mi cuerpo como dulce nereida en primavera, TU VOZ MECIDA regó mi estampa como flor de helecho. y tan bella durmió en mi cabecera, mis suspiros nacen por vez primera, Y mi llanto corrió frente al espejo coronas de esperanza son tu fuego. y mis llamas prenden como hoguera Lejana y bella voz por mi vertida. Lejana y bella voz por mi amada. Es mi oscura y fiel gaviota malherida es lejana y dura como la espada. Lejana y bella voz por mi añorada. ¡Navegas en mi tuétano mecida!